domingo, 27 de mayo de 2012

La Escuela y el currículum oculto. Linda Droguett Latorre


La escuela constituye un elemento de construcción de la forma de ser de las personas. Refleja y reproduce los mecanismos sociales y por ello, es el principal transmisor de los valores culturales.
Este carácter transmisor de costumbres e ideologías hace que fácilmente se confunda la educación con la socialización. Si bien esta última es un "proceso mediante el cual el individuo asimila las pautas culturales de la sociedad en que vive", la educación implica un componente crítico que precisa de un papel activo y analítico por parte del sujeto.
Hay tres aspectos que explicar la necesidad de que la escuela sea educativa.

  • Conocimiento científico vs Conocimiento vulgar.
  • Adquisición de actitud crítica.
  • Compromiso ético.
La escuela tiene un alto grado de influencia a través del currículum oculto, que define como " el conjunto de normas, actitudes, expectativas, creencias y prácticas que se instala en forma consciente en las estructuras y el modo de vivir las experiencias, de estructurar los espacios, de articular los tiempos, de establecer las relaciones, de realizar las tareas." El currículum tiene tres características fundamentales que le otorgan una gran capacidad para influir en los sujetos:

  • Actúa de forma subrepticia 
  • Es persistente 
  • Es omnímodo
Según esto, la escuela produce consecuencias que en muchas ocasiones no pretende, y ejerce influencias que no son percibidas ni tenidas en cuenta a la hora de valorar los aprendizaje so las conductas.
Según la autora, en lo concerniente al sexismo, la escuela debe adoptar un papel activo, evitando la reproducción de patrones sexistas e interviniendo para compensar y corregir los hábitos negativos que se han ido creando durante su escolarización y aprendizaje social.


El currículum oculto presenta varias facetas en la escuela en lo referente al sexismo, se trata de conductas, mensajes que pasan desapercibidos, pero que "calan" en los sujetos y se asientan como parte de su ideología, rutina, costumbres y educación. Son:
  1. Enseñanza como trabajo de mujeres. 
  2. Configuración masculina de los contenidos curriculares 
  3. Expectativas del profesorado respecto a los sexos: profecías de auto-cumplimiento.
  4. Mayor visibilidad tradicional de los chicos.  Los espacios reproducen los patrones de comportamiento sexista.
  5. Configuración de los escenarios.
  6. Opcionalidad de asignaturas condicionada por el género.
  7. El mito de las excepciones.
  8. Los rituales, las normas y el lenguaje.
  9. Los comportamientos de los alumnos.



“El curriculum oculto  funciona de manera implícita a través de los contenidos culturales, las rutinas, interacciones y tareas escolares.  No es fruto de una planificación “conspirativa” del colectivo docente.  Pero lo que es importante señalar es que, normalmente, da como resultado una reproducción  de las principales dimensiones y peculiaridades de nuestra sociedad”

Curriculum Oculto y Aprendizaje en Valores. Miguel Ángel Santos Guerra.


¿Qué es realmente el currículum oculto? Según el autor, el curriculum oculto son "el conjunto de normas, costumbres, creencias, lenguajes y símbolos que se manifiestan en la estructura y funcionamiento de una institución."
El curriculum oculto no sólo está ahí, sino que constituye una herramienta eficaz en el proceso de aprendizaje, tanto para los alumnos como para el profesorado y todos aquellos que integran la organización del centro.

El currículum oculto presenta peculiaridades concretas respecto al currículum explícito que son:


  • Es subrepticio, osea, no se manifiesta de forma abierta, está oculto.
  • Es omnipresente, está ahí siempre y en todos los procesos. Solo en la forma de organizar un espacio ya está presente.
  • Omnímodo, porque influye de muy diversas formas.
  • Es reiterativo.
  • Y por último es inevaluable, por que su repercusión no se valora de ninguna forma.
Su eficacia radica en la inconsciencia de su influencia. Todos los valores que lo comprenden se manifiestan de forma espontánea, sin guardar intencionalidad y por ello, pasa inadvertido y se incorpora y establece como parte de la dinámica cotidiana.



El texto habla de como el lenguaje del discurso pedagógico, en muchas ocasiones, nos confunde sobre todo, en lo que tiene que ver con los términos "socializar", "educar", "indocrinar" e "instruir" y por ello los define, estableciendo así sus diferencias.

Si el currículum comprende el "educar en valores", esto nunca debe constituirse como una asignatura más o aparte por que así se terminaría con el objetivo mismo del propósito. La educación moral no es explicar que es moral y que no lo es, ni tampoco determinar conductas que a juicio general son morales; la educación moral es vivir y practicar la moralidad. Según resalta Santos Guerra, el Proyecto de Ciclo debe ser consecuente con el currículum oculto. Lo que de ningún modo debe ocurrir es lo que en la gran mayoría de los casos ocurre cuando por ejemplo, "se pretende hacer ciudadanos participativos (sin que tengan arte ni parte en la vida del centro) y creativos (sin que tengan la posibilidad de expresar libremente su opinión)".



La educación no necesita del complemento "en valores" por que la educación ya está cargada y basada en valores que constituyen su currículum oculto y que se transmiten de manera transversal. No es útil crear asignaturas que traten valores porque los valores se manifiestan por si mismos en el curso normal de nuestras vidas. Lo que resalta Santos Guerra es la necesidad de que los valores se vivan, dentro y fuera de la escuela, para que queden arraigados en las costumbres.
Como ejemplo ilustrativo, el autor indica algunos valores o concepciones habituales y los relaciona con sus significados ocultos. Algunos de ellos son:
  • Estereotipos de género.
  • Concepciones de poder.
  • Dificultad para aprender unos alumnos de otros.
  • Estructura temporal.
  • Competiciones y comparaciones.

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"Hace falta, pues, plantearse la cuestión desde bases exigentes. Si la institución encarna 
los valores será fácil que los alumnos aprendan a vivirlos. Si los profesionales de la 
educación son ejemplos de ciudadanos honestos, comprometidos, solidarios, tolerantes 
y sensibles, es probable que los alumnos hagan suyas las concepciones, las actitudes y 
los comportamientos de sus maestros. Porque los alumnos aprenden a sus profesores, no 
solamente de sus profesores. "



Evaluación en Música (comparativa de centros).


En esta entrada encontramos la comparación de la evaluación que se leva a cabo en dos centros de educación secundaria en el área de música.

El primer plan está diseñado de forma que se valore todo el proceso de aprendizaje, desde la adquisición de contenidos y habilidades, hasta la práctica de lo aprendido. En él se plasma una intención formativa, ya que entiende que a medida que se produce el aprendizaje, se debe evaluar y proporcionar herramientas de mejora.

Es un plan integral que hace claro hincapié en la necesidad de considerar los avances y mejoras en todas las dimensiones del sujeto en el área que se trata. De esta forma, la evaluación comprende no solo los aspectos relacionados con la adquisición de conocimientos y destrezas, sino que incluye la necesidad de evaluar el esfuerzo, la actitud, la constancia...
Además de ello, plantea algo muy interesante que es la atención a la diversidad. Este plan está basado en la importancia del conocimiento de autores y piezas para un adecuado desarrollo de la sensibilidad musical, pero también destaca la necesidad de que los alumnos participen de forma activa en la creación o interpretación de una obra musical, ya sea a través del canto, de la interpretación de un instrumento o de la expresión corporal en forma de baile.
Otro punto relevante del informe es que propone la transversalidad de la materia así como una metodología y evaluación compresivas que incluyan además otras materias y conductas transversales como la capacidad de comunicación, el trabajo en grupo y colaborativo, la escucha, el análisis crítico o el compañerismo.



Por otro lado, se analiza el programa de otro centro en el que la evaluación de la asignatura de música se encuentra más en consonancia con aquello a lo que estamos acostumbrados a ver en los centros. Una evaluación que parte de los contenido teóricos y del producto final, sin hacer tanto hincapié en la complejidad del proceso de aprendizaje. Si bien es cierto que resalta la necesidad de desarrollar la capacidad de escucha e identificación de las distintas piezas musicales, así como la escucha crítica y tolerante de diferentes estilos.

Ambos centros resaltan la importancia de la actitud positiva hacia la música y del desarrollo de la capacidad de escucha e identificación musical. Pero mientras uno mantiene un modelo más tradicional en el que prima la adquisición de contenidos teóricos y la interpretación de obras musicales con un solo instrumento, común a todos los alumnos; el otro propone la evaluación como una sucesión de observaciones diarias del desarrollo del aprendizaje y de la actividad musical e interpretativa en cualquiera de sus posibilidades.